Por fin la playita

Después de dos largos días de viaje con frió, lluvia y animales salvajes, el calor y la playita y como no unas buenas olas nos dieron la bienvenida. Entre la tarde de ayer y el día de hoy hemos recorrido unos 120 Km por la costa sur, Hemos conocido una familia encantadora que nos han abierto las puertas de su casa y nos han enseñado los secretos para crear un fantástico yogurt de búfala. Un poco mas al este nos encontramos con los pescadores, que todas la mañanas y tardes noches se suben a un palo, y con una pequeña caña pasan las horas pescando pequeños peces para luego vender al borde de la carretera.a
Hoy nos hemos dado un descanso y hemos aprovechado para disfrutar de la playa y las olas. No eran muy grandes, pero nuestro amigo Diego me demostró su destreza y habilidad para moverse en el agua como un delfín, eso si, como un delfín sin aletas, después de unos minutos en el mar enfurecido lo perdí de vista y despues de oír unos llantos, semejantes a los gritos de una foca pariendo, lo localicé en la orilla de la playa, no podía ni con su alma. Tendré que entrenarlo un poco más, para poder enfrentarse a las olas de Bali. Una vez recuperado hemos chutado el atardecer, y ahora comemos una rica cena en un restaurante chilout a la orilla del mar.
Saludos a todos